Los duques de Sussex han sido muy criticados y calificados como ‘hipócritas’ por sus recientes viajes en jets privados, primero a Ibiza y luego a la Costa Azul francesa. 

La razón por las que Meghan y Harry han sido señalados, es que por un lado dicen estar preocupados y ocupados por la conservación del medio ambiente y el cambio climático, y por el otro, vuelan en aeronaves privadas que son mucho más contaminantes que un vuelo comercial, además de lo costosos que son esos jets, unos US$20 mil por viaje. 

Ken Wharfe, quien fuera guardaespaldas de la princesa Diana expresó: “Es hipócrita que Harry hable de los cambios climáticos y usa jet privado”, opinión que fue respaldada por gran parte de la prensa británica y por muchos de los ciudadanos. 

Se les ha criticado a esta pareja real los elevados gastos de su nueva residencia Frogmore Cottage, cuya remodelación costó más de dos millones de dólares, así como también los gastos de Meghan, por su hostentoso Baby Shower que se realizó en Nueva York.